Reseña 1984

Título: 1984

Autor:  George Orwell

Editorial: DEBOLSILLO

Año de publicación: 2013 (Original 1949)

Saga: No

Precio: 7.95€

 Sinopsis
En el año 1984 Londres es una ciudad lúgubre en la que la Policía del Pensamiento controla de forma asfixiante la vida de los ciudadanos. Winston Smith es un peón de este engranaje perverso, su cometido es reescribir la historia para adaptarla a lo que el Partido considera la versión oficial de los hechos... hasta que decide replantearse la verdad del sistema que los gobierna y somete.

Opinión personal

Nos encontramos en 1984, en un mundo consumido por las continuas guerras que se mantienen entre las tres grandes potencias existentes: Oceanía, Esteasia y Eurasia. De la mano de Winston Smith, un trabajador del Partido Interior y por tanto ciudadano de clase media, conoceremos la situación en la que se encuentra Londres, perteneciente a Oceanía y dominado por un régimen totalitarista en el que hasta el más mínimo detalle está controlado por el Partido.

Winston trabaja para uno de los cuatro ministerios en los que se dividía el sistema gubernamental y que se utilizaban para imponer y hacer cumplir la voluntad del Partido, concretamente el Ministerio de la Verdad, donde se encargaba de modificar toda aquella información que no fuera beneficiosa para el partido, es decir, se encargaba de modificar el pasado para que coincidiera con los ideales del partido en ese momento. Las calles estaban repletas de carteles con la cara del Hermano Mayor, líder omnipotente del Partido, así como letreros sobre las fachadas con los eslóganes del partido: La guerra es la Paz, La libertad es la esclavitud, La ignorancia es la fuerza. Además, los ciudadanos también eran expiados constantemente para evitar rebeliones a través de micrófonos instalados por las calles de la ciudad e incluso los bosques y sobre todo los expiaban a través de las temidas telepantallas, televisiones que se dedicaban a retransmitir día y noche noticiarios en los que siempre salía favorecido el partido, himnos del mismo e incluso un apartado dedicado a generar rabia contra los enemigos, al cual era obligatorio asistir, denominado “Los dos minutos de odio”. Además las telepantallas eran de doble dirección, la Policía del Pensamiento controlaba a través de ellas a cada uno de sus ciudadanos, estudiaba su comportamiento diario, las actividades que realizaban, sus palabras, sus gestos e incluso controlaban las palabras que decían los que hablaban en sueños, cualquier mal gesto, actitud o conducta que pareciera contraria al partido y desaparecerías del mapa sin dejar huella. Por supuesto, las relaciones también estaban controladas por el Ministerio del Amor, no se consentía que existiera el deseo, el sexo sólo estaba bien visto si era para procrear y desde bien pequeños el partido se encargaba de adoctrinar a los niños, sobre todo los hacía especialistas en delatar a los propios padres.

Winston siempre había sido un ciudadano ejemplar, pero un día comienza a dudar sobre la eficacia del Partido, encuentra indicios sobre la gran mentira que se está llevando a cabo y decide rebelarse.

Esta novela me ha impactado tanto que realmente no sé ni por dónde comenzar. Si se busca una historia en que lo principal sea la trama y las historias de los personajes, esta no sería la indicada. Sin embargo, es una novela que te invita a pensar, a reflexionar, la trama deja de carecer de importancia para dar paso al trasfondo. El libro está escrito en 1949, y en él se expone el mundo que imaginaba Orwell para el año 1984, y quizá lo más sorprendente, lo que atrapa al lector y le hace reflexionar es que realmente la dictadura que imaginaba no es tan diferente de la realidad que vivimos hoy en día. Demasiadas coincidencias que quizá nos recuerden que tal vez no seamos tan libres como creemos.

Si tuviera que destacar algún fallo quizá sea el apartado del apéndice del que prescindiría totalmente, páginas y páginas donde se explica el lenguaje que pretendía utilizar el partido, tipos de palabras con miles de ejemplos que realmente no nos llevan a ninguna parte. Por otro lado tampoco le encuentro demasiado sentido a la historia de amor, me parece demasiado fría, demasiado precipitada, una historia que no he llegado a entender del todo y que no ha conseguido emocionarme en ningún momento.

En general ha sido una magnífica obra, un clásico que todo el mundo debería leer en algún momento de su vida. Sabiendo que no se ha de buscar una bonita historia sino un trasfondo que hará reflexionar y nos hará darnos cuenta de que la idea de sociedad que se plantea no es tan descabellada, sino que puede estar más cerca de lo que creemos.

 

 << La conciencia de estar en peligro, hace que ceder todo el poder a una pequeña casta parezca una condición natural e inevitable para la supervivencia>>

<< A largo plazo una sociedad jerárquica solo era posible si se basaba en la pobreza y la ignorancia>>

<< Las masas servían solo para utilizarlas y para traicionarlas una y otra vez>>

<< Sabemos más de lo que nos cuentan, pero preferimos creer que no es así>>